Ted Chiang. Fragmento de «¿Te gusta lo que ves? (Documental)»

Ayer subí a El rincón de Nacho una reseña de La historia de tu vida, el libro de Ted Chiang publicado por Bibliópolis hace más o menos nueve meses y que ha fascinado por completo a un porcentaje altísimo de sus lectores. Y no es para menos. En su interior anida la a priori complicada cuadratura del círculo de aunar en una síntesis perfecta forma y fondo; unos relatos con una fuerza avasalladora que están bien escritos, tratan temas atractivos, regalan a los cuatro vientos elevadas cantidades de ese sentido de la maravilla que algunos necesitamos meternos en vena mes tras mes y constituyen un alarde conceptual inconmensurable que estimulan al máximo la curiosidad y el intelecto de los lectores.

Extractar un fragmento de cualquiera de ellos y que tenga sentido es harto complicado; me iría a varias páginas de extensión y la editorial podría soliviantarse. Así que me he ido al que resulta más fácil de «atacar». En «¿Te gusta lo que ves? (Documental)» Chiang afronta lo que tan bien define en el título: un documental sobre el impacto que tiene en una universidad americana un referéndum en el que se decidirá si sus estudiantes deberán someterse a la caliagnosia; un tratamiento que impide la percepción de la belleza en los rostros de la gente. A través de sus diversos segmentos nos aproxima a su necesidad, los pros y contras, los tejemanejes de los grupos de presión asustados de las potenciales consecuencias de su aprobación, la evolución de la campaña y su resolución, escrutando en lo más hondo de esa sociedad de la imagen en la que vivimos inmersos y que condiciona incontables facetas de nuestra vida.

Quizás sea el menos característico de lo que se puede encontrar en La historia de tu vida, pero en las siguientes palabras se pueden observar la tremenda capacidad analítica de Chiang, su inteligencia y la manera de abordar conceptos que uno no espera encontrar en un relato de ciencia ficción «dura».

Del discurso en Pembleton de Walter Lambert, presidente de la Sociedad Nacional de Caliagnosia.

Piensen en la cocaína. En su forma natural, como hojas de coca, es agradable, pero no hasta el extremo de convertirse en un problema. Pero si se refina y se purifica, se obtiene un compuesto que asalta los receptores de placer con una intensidad nada natural. Es entonces cuando se vuelve adictiva.La belleza ha pasado por un proceso similar, gracias a los publicistas. La evolución nos dio un circuito que responde ante el buen aspecto –llamémosle el receptor de placer de nuestro córtex visual–, y en nuestro entorno natural, era algo útil. Pero tomemos a alguien con una piel y una estructura ósea que sólo se encuentren en una persona entre un millón, añadamos maquillajes y retoques profesionales, y ya no estamos viendo belleza en su forma natural. Se trata de belleza de nivel farmacológico, la cocaína del buen aspecto.

Los biólogos llaman a esto «estímulo supernormal»; si se le da a un pájaro un huevo gigante de plástico, lo incubará en lugar de sus propios huevos de verdad. Madison Avenue ha saturado nuestro entorno con este tipo de estímulos, esta droga visual. Nuestros receptores de belleza reciben más estimulación que de la que están preparados para soportar; obtienen más en un solo día de todo lo que recibieron nuestros antepasados en toda su vida. Y el resultado es que la belleza está arruinando poco a poco nuestras vidas.

¿Cómo? De la misma forma en que la droga se convierte en un problema: interfiriendo en nuestras relaciones con otras personas. Nos sentimos insatisfechos con el aspecto de la gente normal porque no pueden compararse con las supermodelos. Las imágenes bidimensionales ya son graves, pero ahora, con las spex, los publicistas pueden poner una supermodelo justo delante de ti, mirándote a los ojos. Las compañías de software ofrecen diosas que te recuerdan las citas. Todos hemos oído hablar de hombres que prefieren novias virtuales a las reales, pero ellos no son los únicos que se ven afectados. Cuanto más tiempo pasamos rodeados de preciosas apariciones digitales, más se resienten nuestras relaciones con los seres humanos reales.

No podemos evitar ver estas imágenes y seguir viviendo en el mundo moderno. Y eso significa que no podemos quitarnos este vicio, porque la belleza es una droga de la que no puedes pasarte a menos que, literalmente, mantengas los ojos cerrados todo el tiempo.

Hasta ahora. Ahora puedes conseguir otro par de párpados, uno que bloquea esta droga, pero que te permite ver. Y eso es la caliagnosia. Algunas personas dicen que es excesiva, pero yo digo que es suficiente. Se está usando la tecnología para manipularnos a través de nuestras reacciones emocionales, así que es de justicia que la usemos también para protegernos.

Ahora mismo tienen una oportunidad de causar un impacto enorme. El cuerpo estudiantil de Pembleton siempre ha estado a la vanguardia de todos los movimientos progresistas; lo que decidan aquí se convertirá en un ejemplo para los estudiantes de todo el país. Al promulgar esta iniciativa, al adoptar la caliagnosia, estarán enviando el mensaje a los publicistas de que los jóvenes ya no están dispuestos a ser manipulados

La historia de tu vida (Stories of Your Life and Others , 2002)
Ted Chiang
Bibliópolis
Mayo de 2004
Traducción de Luis G. Prado
256 páginas
Ilustración Alejandro Terán
P.V.P. 17,95 €

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3 respuestas a Ted Chiang. Fragmento de «¿Te gusta lo que ves? (Documental)»

  1. alinorak dijo:

    Hola Nacho!!!Qtal???
    Con la fievre de los blog (jeje)Empecé a leer unos y otros y hace ya unos día que me he pasao por akí y la verdad es que vaya currao que lo tienes….además del color tan chulo que usaste (mi favorito,jejeje!!!)
    Bueno, ya t haré algún que otro comentario, por cierto el otro día puse un mensaje en la tira cómica del 13 de marzo….A ver q t parece..;)

  2. Nacho dijo:

    Muchas gracias por los elogios. La estética fue amor a primera vista; me encantó el aspecto, sobre todo la combinación de colores. Quería algo parecido a cYbErDaRk pero cambiando el naranja por un color más «natural», y esta plantilla es muy vistosa.

    Ahora te respondo a lo de la tira cómica. He estado fuera unos días y no he tenido tiempo ^_^

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