Con esto de que Prospectiva entra en breve en hibernación, llevo unas semanas poniendo de nuevo en línea los contenidos de C (el blog anteriormente conocido como C, el hijo de Cyberdark, ahora simplemente…). Por dejadez mía, hace año y pico lo echó abajo un «hackercillo» aburrido al no actualizar el software que le daba alojamiento. Es algo que debía a la treintena de colaboradores que pasaron por sus páginas. Ahora mismo apenas me falta recuperar un 20% de los contenidos.
El hecho es que, después de anunciar el final de Prospectiva, mantuve un intercambio de correos con Eduardo Higueras, el alma máter detrás de Prose Rage, animándome a continuar con ella dándole un giro que eliminase las cargas que suponía. Una de sus sugerencias iba en el sentido de eliminar la figura del editor y que la web se convirtiese en un blog compartido donde cada colaborador pudiera publicar lo que decidiese a su ritmo. De esa manera se mantendría la web sin esa figura central que coordinara los esfuerzos. Le estuve dando vueltas y no lo vi nada claro; quizás Prospectiva podría haber continuado con otro ritmo de actualizaciones pero en su génesis estuvo muy clara que debía haber una labor editorial que trillase y dirigiese los qué, quién, cómo…
Sin embargo la idea anidó en mi cabeza.
Llevo un tiempo «preocupado» (así, entre comillas; no es algo que me quite el sueño) al ver cómo el Aburreovejas tiene cada vez menos visitas. No es algo que tenga solo que ver con el cambio de hábito en lo internautas, en su mayor parte ya dentro de las redes sociales, un ámbito muy vivo pero, también, potencialmente más cerrado. De actualizar diez, doce, quince veces al mes en los dos primeros años de vida de esta bitácora… en los últimos tiempos apenas publico ¿cuatro? veces al mes… si llega. Es algo que también se puede ver, por ejemplo, en Memorias de un friki, de Iván Fernández, al que los avatares de la vida le han impedido mantener una regularidad que en otros tiempos aportaba más visitas.
También me preocupan la «balcanización», las cabalgadas en solitario. Cómo los proyectos individuales diluyen esfuerzos que, coincidiendo en un mismo lugar, producen sinergias que aumentan el alcance, la difusión, generan un mayor grado de diálogo…
Como habrán imaginado, mi respuesta ante un retorno a la publicación en solitario, voy a retomar C bajo un criterio distinto al que tuvo en origen (hace hoy seis años). A partir de ya será un blog compartido a x manos sin un editor que coordine su labor. Cualquiera de los colaboradores que en él participen publicará lo que considere oportuno cuando así lo desee, en función de cómo fluyan las ideas, las lecturas, los condicionantes de la vida diaria… La única guía marcada es 99% literatura, preferentemente fantástica, aunque sin hacerle ascos a nada. Vamos que si alguien quiere glosar la vida y obra de Philip Roth en una serie de 30 entradas podrá hacerlo. Es su espacio. Cabrán reflexiones, entrevistas, criminal blurbs, citas, idas de olla, masturbación mental… escritas por una parte de su antigua banda de mentes aguijoneadas por el género.
En lo que al Aburreovejas toca, esto significa que de aquí en adelante todo lo que se refiere a literatura, y alguna cosilla más, dejará de verse aquí. Comienzo con la reseña que acaba de publicarse de La tierra silenciada, de Graham Joyce, y continuaré con las que escribiré en breve sobre Correr, de Jean Echenoz, Marionetas de sangre, de Juan Díaz Olmedo, o El escondite de Grisha, de Ismael Martínez Biurrun. Lo mismo sucederá con las reflexiones de rigor, los anuncios de presentaciones que me resulten interesantes, las crónicas de eventos varios… Quizás sea poner demasiados huevos en ese cesto para dejar todavía más desnudo éste, condenado a ser receptáculo ocasional para vídeos musicales, calenturas sociopolíticas varias, la serie de televisión del momento… Es lo que tienen las apuestas. O juegas fuerte con sentido o no hay manera de ganar.
Así que… sea.
Pues habrá que seguir C muy de cerca 😉
Buenas
Pues una buena noticia en el panorama, un tanto desolador, del fandom.
Por cierto, ¿has leído algo de Peter Hamilton? Yo estoy en ello y me parece un buen substituto de Banks (aunque a un nivel menor), a falta de más novelas de La cultura.
Un saludo
Ya podías escribir algo para C, una cosa de esas cañeras que te van 😉
Apenas leí unas páginas de La estrella de Pandora. No me hizo mucha gracia el estilo, vi demasiados personajes e hilos, miré el grosor del volumen (más la continuación, por salir)… y me centré en novelas más breves. Estoy echado a perder para cualquier novela que tenga más de 350 páginas. De todas formas, si me aseguras que está bien, le daré otro tiento. Más ahora que voy a mejorar mi nivel de inglés (en 24 horas marcho a EEUU a currar)
Por cierto. ¿Qué tal The Islanders?
The islanders es un libro de relatos y no está mal. En la línea de Un verano infinito, de hecho, está ambientando en el Archipielago del Sueño. Pero vamos, que no me ha dejado extasiado.
La estrella de Pandora, estoy acabándolo ahora y está bastante bien. Es una novela de «naves grandotas». Y como hay muy pocas de ese estilo que no se me caigan de las manos, pues la estoy disfrutando mucho. No destaca especialmente en el background: ni tecnologías sorprendentes, ni mundos especialmente elaborados, pero Hamilton es bastante competente a la hora de manejar el argumento, que, por otra parte, no está nada mal. Yo diría que es un libro correcto…pero con «naves grandotas», que siempre mola, jaja. Eso sí, se disfruta mucho.
También leí El vacio de los sueños y está me pareció bastante potente. Con ideas más sugerentes y mejores personajes.
Vamos, que me parece un autor muy recomendable de space opera. Eso sí, no le llega a la suela de los zapatos a Banks. Pero es que eso son palabras mayores.
Por cierto, ¿qué vas a hacer a USA? ¿Y cuánto tiempo estarás por alli?
Ah, y sobre escribir en C… es que siempre he pensado que no encajo en el fandom. O, al menos, en ese fandom.
¡Suerte!
Hala!!! Me ha llamado fandom!!!!!!