Un par de memes literarios

Hace casi un año Álex Vidal me retó a cumplimentar el meme de la página 139, por entonces de moda en la blogsfera, y no pude cumplir. Ahora que estoy de vacaciones escolares (aquí en Cantabria conservamos la tradición de descansar la semana de Pascua), entre negociaciones para salvar el colegio, preparar material para el último trimestre y partida y partida al Halo 3, aprovecho para recoger el guante y lanzarlo; a ver si alguien descubre cuáles son los cuatro libros que tengo en la mesilla de noche comenzados y con voluntad de terminar (je, suponiendo que alguien esté interesado en ello, que se me ocurren miles de cosas más interesantes). Aunque está complicado porque, ¡qué casualidad!, en tres de los casos las líneas son de diálogo.

Let’s rock!

El primero:

-No me mires y responde cuando te pregunte -dijo Neizra, hosco, y acentuó la orden con un fuerte tirón que hizo gemir a Daniel.

-Busco a mi hija -respondió Daniel mirando de nuevo hacia la pared, mientras, para sus adentros, tomaba una decisión. Pensó que, si todo estaba perdido, daba igual acelerar la pérdida.

-Es cierto, tu hija… Separa más las piernas…

Podría seguir trascribiendo, pero tendría que llegar a la página siguiente para encontrar un pasaje «idiosincrático». Espero hablar de esta novela en breve porque es una «marcianada» de tomo y lomo escrita por uno de los autores españoles que más vende, completamente inspirada en la obra de H. P.Lovecraft y publicada a lo grande por una editorial de las importantes. Con los ojos como cuadros me estoy quedando.

El segundo

-¡Procuren volver pronto, señor abogado! ¡Hace muchas semanas que mi cocinero filipino no dispone de nada de carne fresca y proviene de una cultura donde tienen multitud de recetas de gato! -Se carcajeó- ¡No se cuanto tiempo podré retenerlo!

El motor de la zodiac arrancó después de tres o cuatro intentos y con un potente rugido comenzó a acercarnos a la orilla, mientras aquella amenaza aún resonaba en mis oídos. Condenado hijo de puta……

La luz estaba disminuyendo a pasos agigantados, como es habitual en esa época del año en Galicia. Pronto sería noche cerrada. A medida que nos acercábamos a tierra podía divisar con mayor nitidez ciertos detalles de la orilla. Casi prefería no haberlos visto. Eran como una premonición de lo que nos aguardaba a tan solo unos centenares de metros. Súbitamente fui consciente del silencio absoluto que reinaba en la zodiac. Me giré hacia atrás y me encontré con seis pares de ojos expectantes, mirándome. Nariz Roja ladró una larga frase en ruso a Víctor. Este asintió y se giró de nuevo hacia mi, mientras me observaba con aquella expresión casi infantil en sus ojos.

-Oficial Kritzinev pregunta donde desembarco, donde tierra. Dice que usted tener que guiar.

Éste creo que es bastante más fácil de situar. Ha sido publicado por una editorial especializada en cómic y a pesar de su nula promoción está a punto de lograr una reimpresión. Parte de una temática muy de moda en el terror actual, sobre todo en el cine, y originariamente se publicó en formato blog.

El tercero:

-¿El polizón es real?

-Oh, sí. Y también hostil, aunque ya hablaremos de eso después.

-¿Tienes alguna idea de qué es?

-No -respondió-, pero he descubierto algo muy interesante.

Lo que Mademoiselle tenía que contarle hacía referencia a la topología de la artillería. La artillería era un conjunto enormemente complejo de ordenadores: capas que se habían ido extendiendo de tal forma durante décadas de vuelo que era poco probable que una mente (ni siquiera la de Volyova) pudiera comprender algo más que los puntos básicos de su topología o que pudiera averiguar cómo se unían y entretejían entre sí.

Como se ve, un «mainstream» adecuado para todo tipo de lectores con el que llevo atorado un par meses. Algo que también me ocurre con el último libro, que lleva varado todavía más tiempo. Y eso que es de relatos y, supuestamente, más fácil de digerir; si alguno no te gusta le das la voleta y pasas al siguiente. Pero ni por esas. Me pusieron de tan mal café la presentación y la selección en sí que lo he dejado en la nevera a la espera de poder afrontarlo de mejor humor (ahora es cuando me llamáis joven turco). El fragmento:

Habitualmente, Ross tenía un temperamento equilibrado, pero cuatro días de viaje en canoa por las tierras remotas del norte de Québec habían empezado a hacer mella en él. En aquélla su cuarta parada en la orilla del río para acampar durante la noche perdió los estribos y por un momento habló a sus compañeros en términos devastadores.

Sin embargo este párrafo no explica tan bien como el siguiente pasaje el por qué de mi cabreo:

El asqueado pensamiento del líder arctariano golpeó la mente de Woodin.

-¡Así que eso fue lo que les sucedió a los colonos arctarianos que vinieron a este mundo! Degeneraron, cambiaron a formas de vida cada vez más inferiores hasta convertirse en estas penosas y dementes cosas que ahora pueblan este mundo, sus últimos descendientes.

»¡Éste es un mundo de horror mortal! Un mundo que de alguna forma daña los genes de nuestra especie y la modifica física y mentalmente degenerándola progresivamente con cada generación. Ante nosotros tenemos el espantoso resultado.

Una obra maestra. ¡Con un par!

Enlazado con este meme tengo pendiente otro que me envió Seleucus hace un mes sobre los libros que voy a leer en breve. Es difícil de responder porque soy muy anárquico con esto de las lecturas y puedo decir ahora un par de títulos que no leeré hasta dentro de cuatro años. Pero la intención es lo que cuenta, ¿no? He aquí los cinco que están en la rampa de lanzamiento, con una breve justificación:

  • El juego de CaínEl juego de Caín, de César Mallorquí. Una cita ineludible depués de todos los años que he esperado a que César publicase una novela que no fuese juvenil. A ver qué tal se le ha dado esta novela negra que promete intriga y emoción.
  • Memorias de Idhún: La Resistencia, de Laura Gallego. Este año hemos tenido la suerte de que la autora haya venido al centro a charlar con los alumnos, para alegría de sus seguidores que, como es normal en el resto de España, son legión. En el caso de mi tutoría de 3º de ESO hay más de una docena, que me han recomendado (y dejado) éste. Prometí leerlo durante las vacaciones, aunque tendrá que esperar a después. A ver qué tal esta fantasía heroica juvenil.
  • El mal de Portnoy, de Philip Roth. He disfrutado mucho con las otras dos obras de Roth que he leído: La conjura contra América y Elegía. Además siento la sana curiosidad por descubrir cuánto hay de esta novela en Muero por dentro, tal y como comentaba David Pringle en su lista de 100 mejores novelas de ciencia ficción.
  • Universo de locos y otras novelas de marcianosUniverso de locos y otras novelas de marcianos, de Fredric Brown. Para leer de una vez, después de veinte años de búsqueda (tampoco demasiado intensa) Universo de locos, y para ver qué tal Por sendas estrelladas, de la que Santiago Díez habló bien en un artículo sobre Brown que escribió para Cyberdark.
  • El terror, de Dan Simmons. Hacía mucho (pero mucho) que no reseñaba un libro para C y he aprovechado que recibimos servicio de prensa de Roca para recuperar esta costumbre. Terror me produce la extensión de la novela (casi 800 páginas) e inquietud la irregularidad habitual de Simmons, pero su habilidad para encantar sierpes y ovejas siempre me ha cautivado.

Y ahora vendría cuando arrojo alguno de estos guantes a la cara de otro internauta a ver si lo coge, pero me ahorro el lanzamiento. Quien quiera servirse uno de estos dos memes tiene vía libre. Faltaría plus.

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Una respuesta en “Un par de memes literarios

  1. Ataulfo dijo:

    Jur, pues a mi el de «Por Sendas Estrelladas» me pareció infumable. La idea está bien, daba para un relato decente, pero la forma de desarrollarlo me parece tan sensiblera y poco creible (digna de un capítulo de «Everwood») que echa por tierra cualquier buena intención que tuviera. Eso sí, los otros dos cuentos largos hacen que merezca la pena el tomo de marras.

    El del «mal de portnoy» no me gustó tanto como esperaba (el síndrome de las buenísimas referencias), pero merece la pena, y desde luego tiene mala leche concentrada para dar y repartir.

    Y bueno, la portada del juego de Caín da mucho miedo (pero del malo), aunque es un autor que despierta confianza.

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