fonz, en su retorno a La estación fantasma, ha iniciado una nueva sección aperiódica (espero que más periódica que las mías) bajo el título de «Tebeos que me han convertido en lo que soy». Declaración de principios:
Tebeos que me obsesionaron durante temporadas enteras, que leía y releía hasta casi desintegrarlos en épocas chungas o divertidas. O en tardes de plomo donde encontraba en esos tebeos un extraño consuelo, o disfrutados durante infinitos veranos infantiles que parecían no acabar nunca. No son tebeos que escoja por su calidad, algunos son muy buenos, otros no tanto, otros serán detestables. Sin embargo significan mucho para mí, y eso, que contribuyeron a (de)formarme irremediablemente.
Como primera andanada elige: Palomar, de Beto Hernández. Un cómic que admiro pero en el que nunca he entrado, quizás por una lectura defectuosa (achacable a la nefanda publicación por parte de La Cúpula), quizás porque estas historias río en el mundo real con múltiples personajes me van más en la literatura que en el cómic,…
El caso es que después de leer la entrada, visitando enlaces de blogs sobre cómic que tengo en favoritos, a través de La BD, un espacio dedicado mayormente al tebeo francobelga, he visto que Régis Loisel ha inaugurado una página personal en la que se presenta al mundo de la red. Y el Losiel de La búsqueda del pájaro del tiempo es uno de los culpables de mi inclinación y afición inmisericorde hacia lo que se viene en etiquetar como fantasía heroica. Los cuatro álbumes de los que consta ocupan un lugar preferente en mi estantería y vuelvo a su interior de verano en verano para mirar. Es una de esas escasas obras por las que seguramente mataría a la hora de hacerme con alguna ilustración que colgar en el estudio que estoy preprando en mi nuevo hogar (eso si dispongo de algún centímetro cuadrado de pared libre, que está por ver).
El Loisel que se puede observar en La búsqueda del pájaro del tiempo, sobre todo el del último álbum, El huevo de las tinieblas, borda un mundo a mitad de camino entre la fantasía heroica y un diseño escenarios deudor de la ciencia ficción clásica del cómic europeo. En él sitúa a unos personajes con un diseño (los calificativos no son gratuitos) inconmensurable, que además de radiar su personalidad con sus poses o gestos tienen presencia, carisma, fuerza,… Y consigue algo que muy pocos tebeos han conseguido conmigo.
Así como hay contadísimos cómics de terror que realmente acaben transmitiendo esta sensación, he encontrado muy poquitos tebeos de aventuras en entorno fantástico que me hayan trasladado cantidades tangibles de ese anhelado sentido de la maravilla del que andamos muchos a la busca. No ha habido viajes a los mundos de la viñeta, paseos por sus ciudades, emoción en sus paisajes idílicos, temor en los infernales,… y sí mucho acartonamiento. Me lo puedo pasar bien leyéndolos pero, la verdad, en esta faceta en mi caso se consigue mucho más con la palabra estimulando mi imaginación (aunque parezca un contrasentido). Sin embargo zambullirme en la gris y neblinosa región de los velos de espuma, escalar entre las aves que pueblan el dedo del cielo, ser perseguido por bestias sedientas de sangre en la fría y peligrosa región blanca, sobrevivir al acecho de el maestro por la frondosa selva,… vivir las vicisitudes que atraviesa el grupo y maravillarme fue (y es) todo uno.
Así que si alguien quiere saber qué ha sido de él (o quién es), bajarse algún fondo bonito (me acabo de poner uno de Peter Pan precioso), repasar su bibliografía,… aquí dejo el enlace.
Por cierto, que no sé por qué Le Tendre y él no siguieron con la segunda serie de El pájaro, iniciada con El amigo Javin, un álbum en el que Lidwine hacía un homenaje a Loisel como deben ser los homenajes. Aportando personalidad. Una pena más que sumar a lo poco prolífico que resulta o la fatalidad de que no haya una edición disponible de la serie en el mercado español. Aunque Norma promete publicar un integral próximamente.
Nota: Y ¡qué mujeres!
Sí que va a haber segundo ciclo de la genial serie. Eso sí, sin Loisel, ni para apañar los dibujos.
El dibujante es de los de soleil, me pareció bastante regulero… Ya podría haberla continuado Claire Wendling, pero nunca llueve a gusto de todos.
Googlea para la información, que está por ahí (lo haría, pero estoy en clase, traduciendo un contrato de arras al inglés ;)) Un saludo.
Bingo.
http://www.bdnews.net/news_765.html
El autor
http://www.lambiek.net/artists/a/aouamri.htm
Pero todavía parece que no ha salido nada.