Esta es la razón por la que Joy Division puede ser una droga sumamente peligrosa para los hombres jóvenes. Pareciera que presentan La Verdad (se presentan a sí mismos como si eso hicieran). Su tema, después de todo, es la depresión. No la tristeza ni la frustración, los estados deprimentes estándar del rock, sino la depresión: la depresión cuya diferencia con la mera tristeza consisten en su declaración de haber descubierto La Verdad (final y sin adornos) sobre al vida y el deseo.
El depresivo se experimenta a sí mismo aislado del mundo de la vida, de modo que su helada vida interior —o muerte interior— sobrepasa todo; al mismo tiempo, se experimenta a sí mismo como una oquedad, completamente despojado, una cáscara: no hay nada excepto el interior pero el interior está vacío. Para el depresivo, los hábitos anteriores del mundo de la vida parecen ser hoy, precisamente, un modo de simulación, una serie de gestos pantomímicos («a circus complete with all fools») que ya no son más capaces de —y que tampoco quieren— representar: nada tiene sentido, todo es una farsa.
Pág 98 – Los fantasmas de mi vida
«Ajusta los mandos hacia el corazón del sol negro»
Mark Fisher (Traducción de Fernando Bruno)
Caja Negra